Se detuvo en un bar al acabar su servicio
Fernando Llorente Roiz, inspector de policía, finalizaba su servicio aquel 7 de mayo de 1975 y se detuvo en el bar Garrote antes de subir a su casa. Había un combate de boxeo por televisión y el bar estaba completamente lleno. Allí se encontró con unos amigos con los que departió y tomó un par de chiquitos.
En torno a las once de la noche recogió una bota de vino que había dejado allí para que se la arreglaran y salió hacia su casa. Mientras tanto, en su casa su esposa, María Icíar Ortueta Ozamiz, había recibido una llamada telefónica preguntando por su marido. Cuando Fernando fue a entrar en su domicilio de la calle Calixto Díez fue abordado por dos terroristas, quienes le dispararon a quemarropa.
Fue trasladado al Hospital Civil de Basurto
Al escuchar los disparos, los clientes del bar salieron a la calle pero ya se encontraron a Fernando tendido en el suelo. Le auxiliaron y le trasladaron al Hospital Civil de Basurto, donde falleció pocos minutos después.
Fernando Llorente Roiz tenía 51 años y era natural de Villanueva de Villaescusa (Santander). Estaba casado con María Icíar Ortueta Ozamiz, hija de un afamado corredor de motos de los años 40, Javier Ortueta. Tenía tres hijas de 20, 17 y 3 años en el momento en que su padre fue asesinado.
D.E.P. Fernando Llorente Roiz, inspector de policía de 51 años, asesinado por ETA el 7 de mayo de 1975 en Bilbao.
