Pobres podemitas, ahora están asustados porque se han filtrado unos mensajes de un chat privado de la policía en el que se decían barbaridades acerca de Carmena o de Hitler. Pobres podemitas, tan comunistas ellos, tan amantes de las checas, del Frente Popular, de “La Pasionaria”, del Che, de Fidel Castro, o de Carrillo “el ejecutor”.
Claro que Hitler era malo, pero no peor que Stalin, quizás no sea mucho mejor alguien que desee “azotar a una mujer famosa porque dice ser un marxista convertido en psicópata”. Viven aterrados tras leer estos mensajes, es lógico que los del “nazí de día y de noche policía” se asusten, ¿qué puede aterrar más a alguien que piensa que “todos los policías son unos bastardos”, que leer un chat así de la policía?
Pobres podemitas, pobres comunistas, no dan abasto. Entre luchar contra un Jefe de Estado que murió hace 40 años y volverse socialdemócratas, después de justificar las atrocidades del comunismo, y reconocerse ellos mismos comunistas, no tienen tiempo para nada, ni siquiera para pensar.
Podrían pensar que ya no engañan a nadie. Podrían pensar que ya no cuela. Podrían pensar que las novedades en España bien vendidas, solo cuelan bien al principio. Podrían pensar que ver la paja en el ojo ajeno sin ver la viga en el suyo les delata demasiado, en fin, que podrían pensar…