Santiago Torres.- Existen una serie de resortes básicos para el control de la Población, bien conocidos por las élites dirigentes desde hace miles de años.
Desde los Egipcios hasta nuestros días, los dirigentes han sabido explotar nuestros defectos en contra nuestra.
Recursos como la ignorancia, la ebriedad, la lujuria, la envidia, la pereza, la ira o el orgullo, no son pecados capitales, sino talones de Aquiles que las clases dirigentes, tan paternalista ellas, lejos de intentar erradicar de entre nosotros, fomentan en su interés.
-Por ejemplo, en lo que se refiere a la ignorancia y la pereza style=”display: block;” data-ad-format=”auto” data-ad-slot=”7261816399″>
Los Romanos convirtieron en Arte y Negocio, los instrumentos de entretenimiento de masas con su “Panem et Circenses”
Dos mil años después, la argucia de entretener a la Población para manipularla es tan efectivo como en las arenas del Circus Maximus,
Pocas diferencias hay, Ahora en vez de arena hay césped,
En vez de cabezas decapitadas, ruedan balones.
En vez de hablar de Gladiadores (Samnitas, Mirmillones, Reciarios, Equites,…), hablamos de Jugadores (Portero, Defensas, Centrocampistas, Delanteros).
En vez de Escuelas de Gladiadores, tenemos Equipos
En vez de luchar por lograr ser “Libertos”, luchan por el Balón de Oro
La herramienta del “Panem” romano ha evolucionado dando lugar a los Estados del Bienestar y sus subsidios, pero básicamente sigue consistiendo en crear muchos estómagos engañados y algunos estómagos agradecidos
-Por ejemplo en lo que se refiere a la lujuria
Resulta revelador el interés de las clases dirigentes de todos los tiempos, por entrometerse en algo tan personal como los comportamientos sexuales.
A las élites siempre les han interesado mas, los Ciudadanos, de cintura para abajo, que de cintura para arriba
Matrimonios concertados, moralidad, tabús, pecado, costumbres, ablaciones, castraciones, homosexualidad, castidad, abortos,….. son las herramientas usadas por el Poder atemporal para imponer unas costumbres sexuales en la Población y controlarla.
Así ha sido siempre y sigue siéndolo ahora.
Solo varían las dosis, desde la privación de antaño, a la saturación de nuestros días. Desde la Religión explotando el sentimiento de Culpa hemos evolucionado hacia las Ideologías de la Ingeniería Social que también explotan el sentimiento de culpa. style=”display: block;” data-ad-format=”auto” data-ad-slot=”7261816399″>
De alguna forma estos mecanismos forman parte de nuestra fisiología como el mismo talón de Aquiles, aunque la Anatomía no los haya localizado aun, pues todos somos en mayor o menor medida vulnerables si se activan estos resortes.
Quizás, cuando la Ciencia Médica localice en nuestros cuerpos estos resortes, puedan ser quirúrgicamente extirpados como el apéndice.
Hasta que llegue ese día, tendremos con conformarnos con cuidados paliativos basados en una actitud crítica permanente, incluyendo en nuestras dietas la lectura y evitando el abuso de medios audiovisuales
