Uno no puede menos que sonreír ante esa broma que gastan los sedicionistas sacando pecho en sus discursos como adalides de la democracia, especialmente ante los medios. La palabra democracia está siendo tan prostituida y vaciada de contenido por todo el mundo como lo fue la palabra libertad. Y eso reafirma a quienes en realidad ignoran lo que significan ambas palabras: ni democracia ni libertad. Cuando los nacionalistas repiten sus cansinos mantras bajo su eterno manto victimista: “Esto sería imposible en una democracia, solo queremos votar y no nos dejan” no solo se burlan de la democracia, sino de los españoles; en especial de los catalanes. Desde luego que no, señores sedicionistas. Si esto, España, fuese una democracia nada de lo que ocurre y Vds. están haciendo sería posible. Tampoco sería posible nada de lo que ha estado pasando y ha ocurrido en toda España, Vds. incluidos: por refrescar la memoria mencionaremos lo de la ITV del hijo de Pujol, lo de Urdangarín, la Corinna, el Campeón, Eres que Eres falsos, Faisanes, Pallerols, pagos en B a los partidos, tres por ciento que luego ha sido mucho más, mordidas espectaculares, hundimiento del Carmelo, Filesas, Malayas, Palma Arena, Ghürtel, Bárcenas, Amy Martin, las “Caixas d’Estalvi” y aquello que se me quedan en el tintero porque ya aburre. Vds., amigos míos, forman parte de este sistema tan español y europeo; especialmente patente en la parte del arco Mediterráneo porque es donde se utilizan sistemas políticos parecidos: pura y simple partitocracia, nada de democracia. Por eso tienen todos los mismos problemas. Así que no hinchen pecho hablando de democracia.
Tampoco sería posible ningún delirio soberanista, y mucho menos escondiendo corruptelas bajo un símbolo y sentimiento nacionalista que se han sacado de la manga y tan buen uso le están dando para satisfacer su avaricia. Vamos a dejarlo así, como quien barre y lo esconde todo bajo el felpudo de la estelada, porque en eso han convertido su símbolo falso, que con ser falso ya tenía bastante desgracia.
La corrupción que ha arrasado como un tsunami toda expectativa de supervivencia de la clase media en Cataluña tampoco tiene nada que ver con ninguna democracia porque sin separación de poderes esa corrupción está asegurada. Ya nos lo advirtió ese loco de Montesquieu. Y la corrupción no es solo política: también afecta a la prensa, las radios y las tv autonómicas al servicio de reyezuelos, la manipulación política, la ingeniería social, la educación. Por cierto, las democracias tampoco son viejas ni jóvenes; altas ni bajas, adelantadas o atrasadas…, simplemente son o no son. ¡Y… joder (con perdón)! El Parlament copia el mismo sistema partitocrático que impide la democracia en el resto de España, si tanto les interesa la democracia. En el Estatut lo de la representación de la sociedad civil (no la de los políticos) está missing, o ausente. Y la separación de poderes no sabe no contesta. Claro, si no tienen ni idea ni les interesa saber lo que son, cómo lo van a incluir. Y quien lea todo esto se estará preguntando a dónde fue a parar el famoso “seny català“. Si quieren montar algo disimulen y por lo menos que sea una democracia…, no más de lo mismo, pero mucho peor.
