El origen de la raza casta navarra se pierde en la antigüedad, si bien parecen ser descendientes del primitivo Bos Brachyceros, rumiante prehistórico europeo, que junto al Uro, es la raíz genética más remota de los rumiantes actuales. Dado su parecido morfológico, y al pasar a través del Pirineo, se establecieron en las montañas Navarras, cuyo destino final era la producción de carne además de aprovechar su régimen de explotación extensivo para mantenimiento de la biodiversidad y espacios naturales.
En la actualidad la Raza Lidia Casta Navarra está considerada por la Comunidad Foral de Navarra como Raza Autóctona en Peligro de Extinción, esto quiere decir que el número de efectivos presentes representa un número insuficiente para que la raza se encuentre libre de desaparecer en un futuro no muy lejano.
Por ello se han puesto en marcha una serie de medidas, cuyo pilar fundamental es el desarrollo de un “Programa de Conservación y Selección de la raza”, para lo cual fue necesario describir la raza, punto de partida en el que colaboraron el Departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación, la Asociación de Ganaderos de Casta Navarra ACASNA e INTIA, y su posterior publicación por Orden Foral.
La actividad comercial más importante de esta raza es la venta o alquiler de ejemplares por su comportamiento, para los festejos populares. Es de gran repercusión económica y social el mantenimiento de estos animales para que no se pierda esta parte tan importante de nuestro patrimonio cultural.