Personajes de tipos diferentes,
que distingue quizás sólo el pelaje,
disfrazados de momias complacientes
van frotando las manos sonrientes
transformando la fauna del paisaje.
Van y vienen, picando y repicando,
y a tu chepa se suben si descuidas,
siempre atentos sus versos recitando
muestran artes de quienes, predicando,
te prometen ser ellos el rey Midas.
Todos cuentan las mismas letanías
-aunque algunos no fueron a la escuela-,
sin ser magos te anuncian profecías
que ofrecen el parnaso. Si te fías
cual jamelgo te clavarán la espuela.
Parecen, aparentan, ser humanos.
de pinta y aspecto jesuíticos,
siempre amables, gentiles, dan las manos,
como sombras te siguen, son fulanos,
gallos del corral, nuevos políticos.
©donaciano bueno (…y sus poemas de medio pelo)